CONTRA LA DESESTABILIZACIÓN

Festival de la democracia. Más de 150 mil personas ignoradas por los grandes medios. Gracias al You Tube, pude ver esta tarde, algunos trechos.

De los famosos: Copani…genial. La canción para el vice, estupenda. Gieco, impagable como siempre. Charly García, que no es precisamente santo de mi devoción, imponiendo respeto por su autoafirmación luego de su autodestrucción.
De los militantes: El grupo Clase K Cumbia Social, conformado por militantes de un comedor comunitario de Alejandro Korn, del conurbano bonaerense, que cantó la cumbia titulada “el cambio recien empieza¨ inspirada en la presidenta Cristina Fernandez de Kirchner. ¡Cómo la tienen clara esos pendejos! IMPRESIONANTE.

Quiero comentar también el testimonio de Pablo Echarri. CLARÍSIMO. En estos párrafos queda grabado lo que le ha sucedido a muchos:

Periodista: ¿qué fue lo que te hizo apoyar este modelo...?

P.E. “A partir del 2003 fuimos protagonistas de cambios muy profundos y radicales.. -hace referencia a la acción de Néstor incluyendo a los actores en los derechos autorales- pero todavía me daba miedo, cierto pudor de expresarme y definirme políticamente. La muerte de Néstor Kirchner fue definitiva. Me dí cuenta de que de aquí y ahora era importantísimo necesario apoyar y fortalecer ese resarcimiento histórico que se había llevado adelante. La muerte de N.K. hizo que ya no postergue más esa decisión de acompañar este modelo y sobretodo acompañarla a Cristina que es sin duda la esperanza de todos los argentinos.”

Nunca me gustaron los personajes de la farándula, y reconozco que siempre tuve prejuicios con los “famosos” del medio artístico, excepto cuando uno percibe, como en estos casos, una profunda sensibilidad y un sincero compromiso con los valores profundos del hombre. Pablo Echarri, nota diez.
Si de divulgar se trata, para vencer el ninguneo de la gran prensa, van los dos sites del youtube para ver a los militantes de Clase K Cumbia Social, y de Pablo Echarri.

http://www.youtube.com/watch?v=Y6_28OUyuz0&feature=player_embedded
http://www.youtube.com/watch?v=QQ_ubjmfefQ&feature=channel

Pero junto con toda esta fiesta, y este colirio para los ojos militantes, no podemos dejar de tener presente Villa Soldati, con sus muertos, su xenofobia, y la situación creada al Gobierno de Cristina por el desgobierno de Macri.

No se puede ser angelical. Uno conoce el olor a puntero, a matón, a armazón política. No es nuevo en la Argentina. Lo supo Alfonsín. Lo supo De la Rua. Y curioso, no? Parece que le quieren hacer lo mismo a Cristina.

Punteros del Pro, capitalinos. Punteros duhaldistas del conurbano. Grupos de infiltrados, que no son vecinos de esos barrios, que están queriendo que corra represión y sangre. Para explicar las palabras del Padrino H. de P. proferidas desde una cátedra internacional, cuando la única cátedra que ese infeliz podría dar es de caudillejo de quinta categoría.

Hermoso que la respuesta a todo eso, sea una Plaza alegre, descontraída, pacífica. Pero super consciente y politizada. De eso no hay duda. Dispuesta a defender a capa y espada lo conquistado por todos.

Sólo falta ahora que los funcionarios del Gobierno de Cristina demuestren a qué vinieron, y si el incapaz de Macri se niega a solucionar, ellos con la fuerza del conjunto nacional ayuden a esa gente y solucionen el problema, combatiendo exclusivamente a los infiltrados. Y cumpliendo la constitución, que para eso son funcionarios.

Cuando hablamos de profundizar el modelo, no hablamos de nubes aéreas. Hablamos de casos concretos como éstos, como el horror de Formosa con sus tobas.

Y de corazón: así como exigimos una acción clara y decidida para castigar a los responsables del asesinato de Mariano Ferreyra, aquí debemos exigir de la Justicia la detención y el juicio a ese Capello que fue fotografado con un arma en la mano, tirando a mansalva.

Demostrando que la Cris tiene garra e inteligencia, ha dado un paso más en profundizar, al poner a Nilda Garré que “puso pulso firme” en la reformulación de las fuerzas armadas, para que haga lo mismo ahora en las fuerzas policiales.
Y ese pulso firme que le pedimos es simplemente que la fuerza del Estado sea utilizada exclusivamente para combatir el crimen, y nunca para encubrir o compactuar con los criminosos. Algo que los punteros y matones saben muy bien y que los referentes sociales o militantes desconocen.

Esa es la pequeña diferencia.